Las empresas modernas se apoyan en las tecnologías digitales y los datos, así como en los avances que estos fomentan. Los profesionales de esta área se dedican a trazar estrategias tecnológicas a nivel empresarial, de negocio y de producto que potencien la innovación y el rendimiento. En estos puestos, además, es necesario liderar la implementación de estas estrategias por medio de proyectos de transformación digital. Los especialistas en estrategia digital y transformación pueden trabajar tanto a nivel interno, en los departamentos de tecnología e innovación de las empresas, como en consultorías generales y especializadas.

Esta vía profesional se centra en el uso de los datos como activo estratégico para mejorar la toma de decisiones, impulsar la creación de valor y obtener ventajas competitivas. Estos puestos se dedican a diseñar y ejecutar estrategias de datos sólidas, que sirvan de base para emitir juicios empresariales informados y obtener conocimientos útiles. Asimismo, deben liderar proyectos de implementación de herramientas de datos y obtener información empresarial basada en los mismos. En este ámbito, los profesionales trabajan a lo largo de toda la cadena de valor de una empresa, desde la cadena de suministro hasta las operaciones de marketing y de venta digital.

Esta área es el motor del avance digital, pues combina los conocimientos técnicos con las habilidades empresariales para navegar la rápida evolución de la tecnología. En esta esfera es importante identificar tecnologías emergentes, evaluar su impacto potencial y gestionar su integración en los modelos de negocio para acelerar la innovación. Los especialistas, consultores y directivos de este ámbito deben fomentar un ambiente de trabajo que impulse la creatividad y la aparición de nuevas ideas, asegurándose de que estas van en línea con los objetivos generales de la empresa. Actúan como puente entre el potencial de la tecnología y la realidad de la organización, pues se aseguran de que las inversiones en tecnología producen beneficios materiales y cimentan la posición de la organización como líder de la innovación.

Este tipo de puestos son clave en la era digital, ya que se dedican a optimizar procesos mediante la implementación de tecnologías digitales. Son esenciales para mejorar la agilidad, la visibilidad y la eficiencia en la cadena de suministro, y en las operaciones de front y back-office. Estos profesionales adoptan tecnologías como el IoT, la IA y el blockchain para revolucionar la gestión de inventarios, las adquisiciones y la logística. Sus conocimientos permiten crear cadenas de suministro más inteligentes y con mayor capacidad de respuesta, que se adapten a los cambios en la demanda y reduzcan al mínimo las disrupciones. Al digitalizar las operaciones, contribuyen al flujo óptimo de la información y los materiales, lo que deriva en excelencia operativa y satisfacción de los clientes.