Javier Pedruelo

¿De dónde eres? ¿Has vivido alguna vez en el extranjero?

Soy español. Siempre había vivido y estudiado en Bilbao, hasta que este año me mudé a Madrid para estudiar el máster. He vivido en el extranjero únicamente durante temporadas breves. La experiencia más importante fue el intercambio de 3 meses que realicé en un colegio de Estados Unidos mientras cursaba 2º de Bachillerato.

¿Por qué decidiste estudiar Derecho?

El derecho nunca había sido mi primera opción a la hora de elegir una carrera universitaria. Prácticamente toda mi familia se dedica a la economía, por lo que siempre me había interesado por la carrera de ADE. No obstante, era consciente de que estudiar una única disciplina no me garantizaría un buen puesto de trabajo en el futuro. Por este motivo, decidí estudiar un doble grado en Derecho y ADE, con la intención de enriquecer mi perfil y diversificar mis posibilidades.

Durante los 5 años de carrera descubrí que, aunque me gustaba la economía, el mundo del derecho me resultaba mucho más interesante. Por ello, decidí orientar mi futuro profesional hacia el campo jurídico. 

¿Qué destacarías de tu experiencia en IE Law School, tanto a nivel profesional como personal? ¿Alguna anécdota que quieras compartir?

IE Law School es una institución exigente, lo que genera un impacto muy positivo en el proceso de aprendizaje de los alumnos.

En el máster, se exige que los alumnos investiguen previamente sobre los temas que el profesor tratará en clase. Esta tarea, aunque resulta compleja y requiere dedicar más tiempo a la preparación de las clases, nos permite a desarrollar nuestras habilidades de aprendizaje de forma autónoma y asimilar mejor los conocimientos.

Además, los alumnos debemos realizar muchísimos trabajos para cada una de las asignaturas del programa. Esto supone que, durante la mayor parte del curso, pasamos mucho tiempo en los edificios de IE; tenemos clase de 9 a 14 y dedicamos las tardes a los trabajos en grupo.

Las sesiones continuas de trabajo en equipo propician que surja una confianza increíble entre los componentes del grupo. Algunos de los compañeros que he conocido en IE se han convertido en amigos muy cercanos. A fin de cuentas, por mucho trabajo que tengamos que hacer, siempre hay lugar para la distensión.

Mi experiencia en IE va mucho más allá de los estudios. Como ya he comentado, el día a día es tan intenso que se crean vínculos muy fuertes entre los compañeros de clase. Yo, personalmente, estoy muy contento con los amigos que he hecho durante el máster y estoy seguro de que los conservaré durante mucho tiempo. 

¿Qué áreas del derecho te interesan y por qué?

Las áreas que más me interesan son el derecho mercantil y el derecho laboral.

El derecho mercantil me llama especialmente la atención porque siempre me he sentido atraído por el mundo de la empresa, ya que mi familia ha estudiado y se dedica a distintas ramas de la economía. Este fue el motivo principal por el que decidí estudiar el doble grado en ADE y Derecho.

Estudiar derecho mercantil me ha permitido comprender mejor el funcionamiento de las empresas. Además, a pesar de querer dedicarme al derecho, me gustaría continuar con la tradición familiar de trabajar en el mundo de la empresa.

Este fue uno de los motivos que me llevó a elegir el Doble Máster de Acceso a la Abogacía y Asesoría Jurídica de Empresas. Los profesores de las asignaturas más importantes del máster (por ejemplo, Fusiones y Adquisiciones o Asesoramiento Legal en Operaciones de Private Equity) son, además de profesionales muy experimentados que trabajan en despachos de alto nivel, grandes comunicadores y docentes de los que he podido aprender mucho.

Es por esto que me gustaría orientar mi carrera profesional al ámbito de la asesoría jurídica, una rama que tendré la oportunidad de conocer de primera mano gracias a las prácticas profesionales que incluye el máster.

Mi interés por el derecho laboral radica en que ha sido el único campo en el que he podido trabajar profesionalmente, ya que realicé mis prácticas curriculares y extracurriculares en este campo . En el grado, tuve un profesor que sentía auténtica pasión por el derecho laboral y, aparte de todos los conocimientos que adquirí durante sus clases, me transmitió su pasión por esta rama del derecho.

En el máster también he tenido un profesor de derecho laboral que, a pesar de impartir clases sobre un área que se suele considerar poco interesante, ha conseguido que todos los alumnos disfrutemos muchísimo aprendiendo sobre ella.

¿Crees que IE aporta una visión más global y comparada del derecho?

Sin duda. La mayoría de los profesores del máster son abogados profesionales que ejercen y trabajan a diario en el campo que imparten, muchos de ellos en los despachos más prestigiosos del país. Esto, junto con la metodología del programa, evita que las clases se conviertan en una mera lectura de la ley y aporta una visión más práctica de todas las ramas del derecho.

¿Cuáles son tus hobbies o intereses? ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?

Suelo dedicar la mayor parte de mi tiempo libre a leer y a correr. Correr por la calle en Madrid puede resultar complicado, especialmente si no tienes ningún espacio verde cerca, por lo que he empezado a correr en el gimnasio. En cuanto a la lectura, me gustan prácticamente todos los géneros literarios.

Además, también me gusta jugar al fútbol o al baloncesto con amigos. De hecho, hemos organizado varios partidos entre los compañeros del máster. Después de los partidos, siempre aprovechamos para ir a tomar algo y pasar tiempo juntos.

¿Cuáles son tus planes al finalizar el Máster de Acceso a la Abogacía? ¿Cuáles son tus metas profesionales?

De momento, voy a comenzar mi carrera profesional en el despacho King&Wood Mallesons, en el área de Corporate. Esta oportunidad me ofrece la posibilidad de ganar experiencia en el área del derecho que más me interesa y de trabajar con grandes profesionales en un despacho de renombre. Se trata de un periodo de prácticas de 6 meses con posibilidad de incorporación, por lo que es difícil saber de antemano cuál será mi siguiente paso.

A pesar de haber estudiado ADE, no me interesa ejercer como asesor interno en una empresa. Siempre he aspirado a desarrollarme profesionalmente dentro de un despacho de abogados, ya sea en el que comience mi carrera o en cualquier otro. Por ello, uno de mis principales objetivos es llegar a ser socio de un buen despacho.

Mi otra gran meta profesional es tener la oportunidad de ejercer en el extranjero. El traslado entre jurisdicciones es poco frecuente en el mundo de la abogacía, pero considero que es una experiencia vital para el desarrollo personal y profesional del abogado, especialmente en el entorno de los grandes despachos internacionales.

¿Cuál es tu opinión acerca del impacto de la tecnología en el ejercicio del derecho? ¿Cómo crees que te afectará a ti y a tu generación en el futuro cercano?

A pesar de que el impacto de la tecnología todavía no ha empezado a manifestarse de forma notable en el ámbito del derecho, es indudable que las innovaciones tecnológicas acabarán transformando este y todos los sectores de la economía. A fin de cuentas, el ejercicio del derecho abarca un gran número de tareas repetitivas y otras no tan repetitivas, como el asesoramiento directo, que se podrían simplificar mediante el uso de los recursos tecnológicos actuales.

Puede que mi punto de vista sea un poco extremista, pero, al margen de los abogados con más experiencia, todos aquellos profesionales que quieran hacerse un hueco en el mundo del derecho y que busquen convertirse en abogados competentes y debidamente cualificados deberán familiarizarse con el mundo del Legal Tech. Además, aquellos que logren superar el proceso de adaptación a este nuevo paradigma, tendrán la ventaja de disponer de medios materiales mucho más sofisticados que les ayudarán a aumentar su productividad.

Creo que mi generación tendrá que ser capaz de vencer el miedo tradicional de los abogados a la tecnología y aprender a incorporar innovaciones tecnológicas en su día a día. Esto fue lo que sucedió hace tan solo unos años con Excel, que se ha convertido en la actualidad en un requisito indispensable para acceder a un gran número de puestos de trabajo. De hecho, en Estados Unidos se exigen conocimientos avanzados de este programa en el examen de colegiación. En los próximos años, será el turno de los Smart Contracts en los procesos notariales, del Big Data en la búsqueda de jurisprudencia o del Machine Learning para el asesoramiento básico de los clientes.

Cada vez son más las tareas que se podrían agilizar gracias al uso de las nuevas tecnologías, a excepción de los juicios, que requieren la presencia de un colegiado. Los abogados de mi generación tendremos que ser capaces de dominar la tecnología antes de que ella nos domine a nosotros. Por ello, considero que es fundamental que los programas de estudios integren asignaturas sobre nuevas tecnologías, tal y como lo hacen los cursos de posgrado de IE.