Luis Miguel Sánchez de Alcázar Alonso

¿Por qué decidiste estudiar el máster en IE Law School? 

Decidí desvincularme de la preparación de oposiciones y elegir una escuela de negocios donde continuar mi formación. Me encontraba en un momento crítico, tanto de mi vida personal como profesional, y sentía que esa decisión iba a tener (y, efectivamente, acabó teniendo) una gran repercusión en el desarrollo de mi carrera a corto y medio plazo. Invertí muchas horas en estudiar las distintas posibilidades, documentándome en internet y en foros especializados. Además, tuve la oportunidad de consultar la opinión de otros profesionales del sector y visitar varios centros. Tras una intensa labor de investigación, me dí cuenta de que no había ninguna escuela de negocios que me fuera a garantizar un nivel de formación, unos contactos y un acceso tan inmediato al mundo profesional como IE Law School.

¿Qué destacarías de tu experiencia, tanto profesional como personal, en IE Law School? ¿Alguna anécdota que quieras compartir?

Cuando participas en un programa de este tipo, con un nivel tan alto de exigencia, tus compañeros se acaban convirtiendo en tu familia. Me resultó sorprendente que un sistema que fomenta tanto la competitividad entre los alumnos acabe creando unos lazos tan intensos.

IE garantiza el acceso a unas instalaciones, materiales y formadores de primer nivel. Sin embargo, ahora que ha transcurrido el tiempo y puedo reflexionar sobre mi experiencia con perspectiva, me doy cuenta de que lo más valioso del máster fue la calidad humana de todas las personas que conocí ese año. Este programa me ofreció la oportunidad de ponerme en contacto con unos compañeros, colegas y amigos que me han acompañado, me acompañan y sé que me acompañarán durante toda mi vida personal y profesional.

¿Qué es lo más valioso que has aprendido en el máster y que aplicas a tu vida profesional hoy en día?

Sin duda, lo más valioso que aprendí en el máster es que la gestión de equipos y personas constituye la parte más importante, gratificante y complicada de nuestra profesión.

¿Crees que IE aporta una visión más global y comparada del derecho?

Desde luego. La gran variedad de puestos jurídicos que ocupan los formadores de IE, el espíritu internacional que inspiran los programas y la diversidad geográfica del alumnado contribuyen a que la experiencia formativa sea mucho más global.

¿Cuáles son tus objetivos profesionales?

Mi principal objetivo a corto plazo es consolidarme como asesor fiscal en un mercado completamente nuevo: el de Oriente Medio. Los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí implantaron el IVA en 2018; en 2019, ha sido el turno a Bahréin y, en los próximos años, Omán, Qatar y Kuwait seguirán sus pasos. Esto supone un nuevo mundo de posibilidades profesionales para los especialistas del sector.

A medio y largo plazo, me gustaría llegar a liderar la práctica de la tributación indirecta en una empresa o en una de las Big Four, ya sea en España, en Europa o en Oriente Medio.

¿Qué es lo que más te gusta de tu profesión?

Al margen del factor humano y los vínculos personales que he tenido la suerte de crear en todos los equipos en los que he trabajado, lo que más me gusta de esta profesión es el dinamismo que la caracteriza. Los asesores fiscales deben desempeñar una gran variedad de funciones a lo largo de su carrera, por lo que el proceso de crecimiento y aprendizaje es continuo. Resulta increíblemente gratificante echar la vista atrás y comprobar cómo has evolucionado profesionalmente desde el comienzo de tu carrera hasta la actualidad.

¿Qué consejo le darías a los abogados del futuro?

Mi consejo es que vivan su profesión con pasión y con honestidad. Para alcanzar el equilibrio entre la felicidad personal y el éxito profesional en un entorno tan exigente como el de la asesoría jurídica o fiscal, es fundamental ser un apasionado de tu profesión y llevarla a cabo con honestidad. Vive con pasión, trabaja con pasión y sé honesto contigo mismo y con los demás.

¿Crees que tu experiencia como opositor te resultó útil durante el máster? 

Sin duda. La disciplina y los conocimientos técnicos que adquirí durante los años de oposición me proporcionaron una ventaja innegable frente a aquellos compañeros que habían comenzado el máster inmediatamente después de su etapa universitaria. Mi experiencia como opositor se ha convertido en una lección de vida que me ha ayudado a mejorar no solo en el ámbito profesional, sino también en la manera de afrontar los retos que se me han presentado en el plano personal.

¿Cómo te ayudó el máster en tu acceso al mercado laboral de la mano de KPMG?

El máster me ayudó en todos los sentidos. No solo me proporcionó las herramientas necesarias para lograr una inserción laboral inmediata y satisfactoria, sino que, además, me aportó visibilidad en el mercado laboral, poniéndome en contacto directo con los socios y encargados de recursos humanos de las mejores firmas del sector.

Personalmente, todas las ofertas de trabajo que recibí durante el máster surgieron como consecuencia de las recomendaciones directas de aquellos profesores con los que tenía contacto diario (socios o directores en sus respectivas firmas). Mi carrera en KPMG comenzó a raíz de una conversación en los pasillos de IE con una de mis profesoras, que ocupaba el puesto de socia del departamento de KPMG en España, donde he trabajado desde entonces (hasta mi incorporación al mercado de los Emiratos Árabes Unidos).

¿Cómo está siendo tu experiencia profesional en Dubai? ¿Qué diferencias has podido observar en la manera de trabajar?

Mi experiencia en Dubai está siendo inmejorable, tanto en el ámbito profesional como en el personal. La diversidad cultural que impregna cada uno de los rincones de la ciudad es uno de los grandes atractivos de este “oasis en el desierto” cosmopolita, dinámico y moderno. Trabajar con culturas tan distintas como la árabe, la japonesa o la india supone un auténtico reto, pero, al mismo tiempo, constituye una fuente de aprendizaje y crecimiento profesional que, en mi opinión, no tiene precio.

Por ejemplo, durante una cena que se organizó hace poco con motivo del cierre de una operación, nos dimos cuenta de que, entre los 14 presentes, había 13 nacionalidades de los 5 continentes representadas. Una auténtica torre de Babel de la asesoría fiscal.

En cuanto a la manera de trabajar, he de decir que he observado muchas más diferencias de las que esperaba. Tras haber trabajado en un mercado tan maduro como el europeo y tan homogéneo como el español, algunas de las prácticas y métodos de trabajo propios del mundo árabe (y también de la cultura india) me han resultado verdaderamente sorprendentes. No obstante, estoy viviendo este proceso de adaptación cultural y laboral como un reto apasionante de desarrollo profesional y una experiencia única que me acompañará durante toda mi carrera.

¿Te imaginabas asesorando a clientes de tan alto nivel y en cuestiones tan relevantes?

Mis objetivos y expectativas durante la licenciatura y la oposición eran completamente diferentes. Fue durante el año que pasé en IE cuando realmente comencé a imaginarme en un entorno profesional como el que he disfrutado en estos últimos años.