Ana Pérez-Montero Gomez
Nací en España y, aunque he vivido casi siempre aquí, también he viajado mucho por Europa y Sudamérica. Me gusta mucho la música y dedicar tiempo a mis hijas. Como bióloga, me apasiona la naturaleza y las acciones que ayudan a su conservación. Llevo casi toda mi vida profesional trabajando en educación ambiental, un campo que ha evolucionado mucho en este tiempo, lo que me ha hecho ser consciente de lo importante que es estar al día de los últimos avances. Por eso me gusta tanto la enseñanza: creo que parte de mi trabajo como profesora es fomentar el pensamiento crítico, sobre todo en esta época de desinformación y noticias falsas.
"El campo de la sostenibilidad evoluciona continuamente, y es necesario estar al día de las últimas investigaciones y descubrimientos".
Educar para promover el cambio en el medioambiente
Trabajar en sostenibilidad requiere un conjunto de habilidades muy específicas. Además de conocimientos básicos y capacidades innatas de liderazgo, quienes aspiran a dedicarse a este campo, cada vez más exigente, necesitan una pasión y una energía enormes si quieren marcar la diferencia. Y con el número creciente de organizaciones que buscan integrar la sostenibilidad en su estrategia empresarial, la demanda de especialistas está aumentando de forma exponencial.
Como profesional de la biología, Ana Pérez-Montero Gómez ha sido testigo de la evolución de este sector fundamental. Su título de biología y ciencias ambientales le abrió las puertas a una apasionante carrera profesional donde ha trabajado con importantes organizaciones medioambientales. También le ha dado la oportunidad de viajar frecuentemente fuera de España, sobre todo a otros países de Europa y Sudamérica. Ana amplió su formación en biología con credenciales especializadas en traducción e interpretación, lo que le permitió trabajar en varias instituciones dependientes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Sin embargo, fue en la educación ambiental donde encontró su nicho. “Durante la mayor parte de mi vida profesional, he trabajado para sensibilizar sobre el cambio climático y la biodiversidad”, explica. Gran parte de esta labor ha sido como miembro de una organización internacional de educación ambiental, donde organizó e impartió numerosas conferencias, talleres y cursos de formación. Pero Ana también ha hecho buen uso de sus habilidades especializadas en varios grupos de trabajo de todo el mundo.
Ahora, aprovecha todo lo aprendido durante su trayectoria para formar una nueva generación de profesionales de la sostenibilidad en el Grado en Ciencias Ambientales para la Sostenibilidad de IE University. Aunque no le resulta fácil compaginar las responsabilidades anteriores con las actuales, Ana cree que su experiencia previa puede ser muy valiosa para sus estudiantes, ya que le permite ampliar el contenido del aula con conocimientos reales y actualizados.
“Lo más satisfactorio de enseñar en este programa son los estudiantes”, afirma. Los alumnos del Grado en Ciencias Ambientales para la Sostenibilidad son un reflejo de la diversidad que caracteriza la Comunidad IE. A pesar de que vienen de países muy distintos y tienen visiones diferentes, los estudiantes demuestran continuamente que pueden ponerse de acuerdo para colaborar e intercambiar ideas que sirvan para construir un futuro mejor. Para Ana, este es uno de los elementos más gratificantes de la docencia.
También aprecia mucho el enfoque basado en proyectos que se aplica en el programa. Esta metodología le permite diseñar salidas de campo y proyectos de laboratorio innovadores donde los estudiantes pueden desarrollar habilidades prácticas y muy relevantes. Además, destaca especialmente la conexión con otros profesores, que ha hecho que se replanteara la docencia como una experiencia de aprendizaje personal.
Esta flexibilidad, que es esencial para los profesionales de cualquier sector, es algo que quiere transmitir a sus alumnos. “La sostenibilidad requiere un enfoque interdisciplinar, es decir, trabajar desde perspectivas distintas y con agentes de otras disciplinas”, comenta. Anima a los estudiantes a estar al día de las últimas investigaciones e innovaciones, algo fundamental para mantener la competitividad y también para generar impacto a largo plazo.